¡QUE SE JODAN!

Es cierto, argumentos y fundamentos sobran para votar "A FAVOR" o "EN CONTRA" del nuevo texto constitucional, solo es cuestión de saber a quién escuchar. Sobre esto último, es necesario mucha seriedad y algo de pudor. La respuesta no la encontrarán en esos charlatanes que, por la Redes Sociales, venden teorías conspirativas, llenas de odios, groserías y mentiras. Yo creo que hay que quererse un poquito y hacer un esfuerzo para desechar la basura informativa y urgar en la verdad, sin caer en la seductora fascinación de las historias distorsionadas. La elección recae en discernir, en cuestionar y en buscar la autenticidad en un paisaje saturado de ruido informativo. Seamos guardianes de la verdad y trabajemos incansablemente para destilar hechos genuinos.

Lo que falta también, es comprensión y buena memoria para recordar cómo y por qué, llegamos a este escenario, donde algunos incluso –afirmando que son de derecha– se han descolgado de la opción "A FAVOR". Más que de derecha, yo diría que el "A FAVOR" es la unidad de todos los que quieren rescatar a Chile.

En lo particular creo que faltan convicciones. Que gane el "A FAVOR" el 17 de diciembre, es algo que va mucho más allá de una nueva constitución para reemplazar la del 2005. La de 1980 dejó de existir hace rato y solo queda lo poco que no ha logrado violar, destruir y secuestrar la mala clase política de izquierda y derecha.

Lo que necesitamos, es recuperar el espíritu de la constitución de 1980, algo que se logró –hasta donde se pudo– en este nuevo texto que precisamente, no fue redactada, discutida, defendida y aprobada por una mayoría de izquierda y menos de traidores. Al contrario, fue un grupo elegido por nosotros y que trabajó y puso su máximo esfuerzo para evitar que otros maquillaran el anterior mamarracho. Pero más allá de aquello, el "A FAVOR", es un voto de rabia, frustración y castigo contra un Gobierno empobrecedor dirigido por una pandilla de ineptos, corruptos y socio de los delincuentes. Un gobierno que ha hecho todo lo posible para  quitarnos el orgullo de ser chilenos. Un gobierno que no financia seguridad, desarrollo y progreso, financia la destrucción y el caos a través de una revolución cultural que busca destruir los cimientos de nuestra instucionalidad y tradiciones republicanas.

El triunfo del "A FAVOR", debiera ser una derrota para el comunismo que estuvo presente en todos los actos de violencia social que se desataron desde octubre del 2018 y que se siguen planificando para el futuro. Necesitamos una plataforma desde donde podamos proyectar y asegurar el éxito de las elecciones municipales del 2024 y las presidenciales del 2025, única forma de cuidar y  terminar de moldear, y no destruir, este nuevo texto constitucional. Sin una mayoría en el congreso, será un trabajo perdido de independientes, patriotas, republicanos, demócratas, libertarios y nacionalistas.

Necesitamos sumar victorias, no más derrotas. Necesitamos que el 17 de diciembre sea un día de triunfo, sin abrazarnos con los comunistas ni con los mamarrachos populistas que hoy nos gobiernan.