CAROLINA TOHÁ: INCOMBUSTIBLE.

Y SIGUE TRABAJANDO MIENTRAS OTROS SE TOMAN VACACIONES... NADA LA DETIENE PARA LOGRAR SU OBJETIVO ¿CUÁL SERÁ?

CON DESINFORMADOS, FANTASIOSOS Y DIVIDIDOS VOTANTES DE DERECHA, EL TRIUNFO DE TOHÁ, CADA DÍA ES MÁS PROBABLE.

En una cena cualquiera, en una conversación como las que probablemente se repiten en muchas familias y grupos de amigos en Chile, se hace evidente una preocupación que trasciende la política y apunta al corazón de nuestra responsabilidad cívica. No importa quiénes sean los interlocutores o los temas que den inicio al debate, el resultado parece ser el mismo: opiniones basadas en superficialidades, desinformación, y una desconexión alarmante con la seriedad que el momento histórico exige.

La derecha chilena, que debería liderar con fuerza y cohesión, parece estar atrapada en un círculo de egoísmo, fantasías políticas y un desprecio por el análisis crítico. Mientras en la izquierda existe una estructura clara y una narrativa bien articulada que moviliza incluso a los menos informados, en nuestro sector se alzan voces que desestiman a los candidatos con mayores posibilidades de éxito y proponen nombres que, sinceramente, generan más vergüenza ajena que esperanza.

Según la última encuesta del Panel Ciudadano de la Universidad del Desarrollo, publicada el 29 de diciembre, la derecha tiene un liderazgo claro en las preferencias generales. Evelyn Matthei lidera con un 34%, seguida por José Antonio Kast con un 21%, mientras que la principal figura de la izquierda, Carolina Tohá, alcanza un 13%. Sin embargo, la encuesta también refleja una fragmentación preocupante. En el rango etario de 18 a 30 años, Kast supera a Matthei, lo que indica una desconexión de los votantes jóvenes con la principal figura de Chile Vamos. Además, el 49% de los encuestados aseguró que no participaría en primarias, lo que denota un desinterés alarmante por los procesos que definen las candidaturas.

Entre los desafíos de este panorama, destaca el rol de figuras como Johannes Kaiser, cuya capacidad para movilizar a los sectores más duros de la derecha no puede ser ignorada. Su discurso tiene resonancia y carisma, pero aquí radica mi preocupación: ¿Está su liderazgo enfocado en fortalecer al sector o en negociar su propio futuro político? Kaiser, con un 20% de apoyo en primarias de Chile Vamos, sabe que no ganará, pero su influencia podría fracturar aún más el sector si decide negociar con otros actores fuera de Republicanos. Chile no puede permitirse que los intereses personales o las ambiciones individuales prevalezcan sobre la necesidad urgente de unidad. Si Johannes, con quien reconozco una cercanía y respeto, realmente valora el bienestar del país, debe considerar cuidadosamente el impacto de sus decisiones y evitar dividir aún más a una derecha ya fragmentada.

Porque, al final del día, Chile está primero. No importa si el candidato se llama Evelyn Matthei, José Antonio Kast, Johannes Kaiser o cualquier otro nombre. Lo que importa es construir un proyecto sólido, cohesionado y patriota que pueda enfrentar con éxito al progresismo ideológico y a las influencias externas que intentan socavar nuestra soberanía. No se trata de elegir al candidato que me conviene más, el que más me agrada o el que mejor representa mis ideales políticos, sociales o económicos; se trata de elegir al que le haga mejor a Chile. Y para ello, cada líder, sin importar su sector dentro de la derecha, debe estar dispuesto a actuar con grandeza y responsabilidad, incluso si eso significa sacrificar ambiciones personales.

Finalmente, el llamado más duro es hacia los votantes de derecha, porque aquí reside la raíz del problema. La desinformación, el ego y la falta de compromiso cívico están destruyendo nuestras posibilidades de éxito. Es incomprensible que profesionales educados y formados en el análisis crítico, quienes lideran en sus respectivas áreas, aborden la política desde memes, titulares sin contexto o conversaciones superficiales. Este comportamiento, más que una falta de interés, refleja un desprecio por la importancia de su propio voto.

Si no corregimos este rumbo, estaremos entregando el país a una izquierda que, aunque llena de relatos sin destino, al menos sabe cómo unificar y movilizar a su base. Carolina Tohá, con un 13% en las preferencias generales, puede no parecer una amenaza en este momento, pero su capacidad para consolidar a la izquierda progresista, junto con la dispersión de la derecha, la convierte en una contendora peligrosa. Chile no puede esperar más; necesitamos un electorado responsable, informado y dispuesto a trabajar por un cambio real. Porque, si seguimos como estamos, nos enfrentaremos nuevamente al dolor de haber desperdiciado otra oportunidad histórica por culpa de nuestras propias divisiones y nuestra incapacidad de actuar con seriedad.

Es hora de cambiar, no solo los liderazgos, sino también nuestra forma de asumir el deber cívico. Chile merece más que nuestros errores, y está en nuestras manos evitar que este ciclo de mediocridad se repita una vez más.

Es hora de pensar en Chile, no en nuestras emociones o resentimientos personales:

A quienes dicen que "jamás votarían por Matthei" o "jamás votarían por Kast" por motivos que califican de traición, les pregunto: ¿realmente creen que Evelyn Matthei o José Antonio Kast son traidores o comunistas? ¿Creen que cualquiera de ellos, con todos los defectos que podamos señalar, representa una amenaza mayor para Chile que el progresismo ideológico y la izquierda que destruyen nuestra soberanía y nuestras tradiciones?

Las palabras son fáciles, pero las acciones son lo que cuenta. Ni Matthei ni Kast son perfectos, pero ambos representan opciones viables para reconstruir Chile, un Chile en el que nuestras tradiciones, soberanía y valores no sean negociados ni entregados a intereses extranjeros ni a agendas ideológicas que minan la cohesión nacional.

Quisiera invitar a quienes insisten en su postura intransigente a reflexionar con un ejemplo histórico: ¿Qué habría sido de Chile si Arturo Prat y sus hombres, antes de embarcarse en la Esmeralda, hubiesen discutido sobre quién era el mejor líder? ¿O si Ignacio Carrera Pinto y los 77 de La Concepción se hubiesen dividido porque alguno no estaba de acuerdo con las órdenes? Si ellos, en los momentos más difíciles, hubiesen pensado en sus preferencias personales y no en lo que era mejor para Chile, nuestra historia sería muy distinta.

Hoy no estamos en una guerra convencional, pero enfrentamos una batalla igualmente trascendental. Esta vez, la lucha no es contra un enemigo extranjero, sino contra nuestra propia incapacidad de unirnos por el bien común. No se trata de si Matthei o Kast son el candidato perfecto para cada uno de nosotros; se trata de cuál de ellos puede representar mejor los intereses de Chile frente al caos y la fragmentación que nos amenaza.

Arturo Prat y los 77 de La Concepción no murieron por el líder que más les agradaba; murieron por Chile. ¿Acaso no podemos nosotros, desde la comodidad de nuestras vidas, sacrificar un poco de orgullo y prejuicio para votar por el candidato que, aunque no sea perfecto, represente una oportunidad real de salvar a nuestra patria?

Es hora de dejar de lado los calificativos de "traidor" o "comunista" y reconocer que las divisiones internas solo benefician a nuestros adversarios. Si seguimos atrapados en discusiones inútiles, perderemos nuevamente la oportunidad de construir un Chile mejor. Por Arturo Prat, por los 77, y por todos los que dieron su vida por este país, pensemos más allá de nosotros mismos y actuemos con responsabilidad y grandeza.

Tardíamente, veremos a esos añejos analistas políticos, levantar la figura de Carolina Tohá, los mismos que hace pocos días atrás, aseguraban que su salida de La Moneda, era inminente. 

A inicios de octubre, en su peor momento, afirmé que Carolina Tohá, era incombustible. ¿Alquién tiene alguna duda aún?

Lo que sí veo es a un Presidente Boric cada vez más solo y aislado. Peor que un pez fuera del agua.

07 DE OCTUBRE DE 2024:

Les costó, pero aprendieron la lección. Y si lo hacen, sean serios, metódicos, con antecedentes concretos y en manos de expertos. Un aprendiz de mago, nunca va a derrotar a un mago.

05 DE OCTUBRE DE 2024 A LAS 19:09:

Como ya se ha publicado varias veces en este Blog, "La Caperucita Roja", salió bastante más astuta que el lobo y que toda la oposición junta. En menos de 12 horas, después de estar en el cadalso, ahora se empodera nuevamente con los temas de seguridad. Eso se llama "hacer fortaleza de las debilidades". Y le coopera en su objetivo, una oposición que cada vez está más perdida y cada vez hace peores análisis políticos.

Creo que a esta Caperucita "Roja", pronto la veremos, con el apoyo de la Roja Izquierda, postulando al sillón presidencial. 

Mientras no hayan nuevos y serios antecedentes, lo peor que podría hacer la oposición es agregar una Acusación Constitucional. Aún no se convencen que es incombustible, y peor aún, no tienen a nadie que le haga el peso para asumir esa tarea.

En resumen, se comió con zapato a todos los políticos. Será interesante ver cómo reaccionan y cuánto más aguanta "la Caperucita".

ÚLTIMO MINUTO: (05.12:23 NOV.2024).

Qué lástima que la oposición haya perdido toda capacidad de análisis y lectura política. Están perdiendo el tiempo.

5 DE NOVIEMBRE  DE 2024:

Creo que esta vez, Pepe Auth, está "OUT". La llegada de Carolina Tohá al Ministerio del Interior no fue una casualidad ni tampoco una decisión completamente autónoma de Boric. Por lo mismo, su salida no es una decisión que Boric, un Presidente completamente derrotado en todos los ámbitos de su Gobierno, pueda tomar y decidir. Él ya no Gobierna y no decide nada.

Puedo estar tremendamente equivocado, pero la verdad la sabremos luego.