DE PANAMÁ A VENEZUELA:

 

🇵🇦 De Panamá a Venezuela: ¿Una “Causa Justa” en el Caribe?

La historia ofrece lecciones que hoy resuenan con fuerza en el Caribe. En diciembre de 1989, Estados Unidos ejecutó la Operación Just Cause en Panamá, destinada a capturar al general Manuel Noriega, acusado de narcotráfico y de anular las elecciones democráticas de ese año. En apenas horas, los principales cuarteles y centros de poder fueron controlados, y la Fuerza de Defensa de Panamá se disolvió incapaz de operar sin su líder.

El detalle clave no fue solo la captura de Noriega, sino la manera en que Washington preparó políticamente el terreno: reconoció previamente a Guillermo Endara como presidente legítimo, lo juramentó en una base estadounidense y entregó el mando civil a un gobierno ya validado en las urnas. Así, Estados Unidos evitó aparecer como ocupante y presentó su acción como una restauración democrática, acompañando el traspaso con ayuda económica inmediata y respaldo del FMI.

Similitudes con Venezuela:

Hoy muchos se preguntan si la experiencia panameña puede repetirse en Venezuela. Y las similitudes son evidentes:

  • Un régimen acusado de narcotráfico y vínculos con el crimen organizado, que se sostiene en lealtades forzadas y control represivo.
  • Procesos electorales cuestionados y desconocidos por la comunidad internacional.
  • Aislamiento diplomático creciente y una narrativa oficial que intenta cohesionar a las Fuerzas Armadas con el discurso de “amenaza extranjera”.
  • Una estructura militar que depende casi totalmente de la figura del líder, tal como ocurrió con la Fuerza de Defensa de Panamá bajo Noriega.
  • En las elecciones de 2024, el candidato opositor Edmundo González Urrutia fue proclamado como el verdadero ganador por la oposición y reconocido como tal por buena parte del mundo democrático, de modo similar a lo que ocurrió con Endara en Panamá en 1989.

Diferencias clave:

  • Gobierno alternativo debilitado: Panamá tenía a Endara listo para asumir; en Venezuela, Edmundo González encarna esa legitimidad, pero enfrenta un aparato chavista que aún controla todas las instituciones.
  • Contexto regional distinto: en 1989 la ola de democratización favorecía a Washington; hoy, Maduro cuenta con apoyos explícitos de Cuba, Nicaragua, Irán, Rusia y simpatías en algunos sectores de la CELAC.
  • Amenaza de violencia interna: Panamá no tenía colectivos armados ni estructuras como el ELN o el Tren de Aragua; en Venezuela, estos actores podrían generar caos tras una eventual extracción de Maduro.

Lecciones aplicables:

La experiencia panameña enseña que capturar al dictador no basta: el éxito depende de contar con un gobierno alternativo reconocido y preparado, de la capacidad de dar un alivio económico inmediato y de asegurar un control militar temporal que impida el vacío de poder. En Venezuela, ese referente existe: Edmundo González, como Endara en su momento, representa el liderazgo democrático que la comunidad internacional ya respalda.

📌 Conclusión:

La gran diferencia es que, mientras en Panamá la sustitución fue rápida y clara, en Venezuela el desafío es mucho más complejo. No se trata solo de la extracción de Maduro y su círculo, sino de neutralizar a los colectivos armados, contener a la milicia, estabilizar un país en crisis económica extrema y lograr que la transición sea percibida como un rescate democrático y no como una ocupación extranjera.

En este escenario, Edmundo González puede convertirse en el “Endara venezolano”: una figura con legitimidad internacional lista para asumir el mando en caso de que se produzca un desenlace similar al de la Causa Justa de 1989.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

EL INVERSOR PÚBLICO DE LA COMUNISTA MINISTRA DEL TRABAJO: UNA AMENAZA A LAS JUBILACIONES DE LAS FUERZAS ARMADAS.

¿CÓDIGO DEL HAMPA O DE JUSTICIA?

¿EXISTE EN CHILE UNA AUTORIDAD MÁS DESPRESTIGIADA QUE EL PRESIDENTE GABRIEL BORIC?